Si llevas poco tiempo trabajando freelance, seguramente estarás ansioso de ganar más proyectos para trabajar. Pero también es posible que sientas que estás compitiendo por quién oferta menos y que eso te preocupe.
Después de todo, el mundo del trabajo freelance también es reñido y muy competitivo profesionalmente.
Si buscas proyectos online en plataformas como SoyFreelancer.com, no solo debes demostrar que tienes las habilidades necesarias, sino también convencer al cliente de que eres el mejor por encima de los demás freelancers que ofertan.
Este proceso puede parecerte difícil si crees que todo se basa en el precio y que el trabajo se lo lleva quien menos cobra. Pero eso no es así:
Recuerda esto:
Cuando una persona contrata un servicio o compra algo, no siempre el primer factor para elegir es el precio. Existe mucho más detrás de la elección que un cliente hace a la hora de contratar.
Hoy te daremos algunos tips claves para que hagas mejores ofertas online y ganes más proyectos freelance.
Algunos de estos, a lo mejor te parecerán obvios o lógicos, pero mucha gente no los toma en cuenta.
Incluso hay personas que copian y pegan el mismo texto en cada proyecto que encuentran. Algo nada personal y que no tiene nada que ver con lo que el cliente solicita. ¡Gran error!
Lo primero que debes hacer es entender bien lo que el cliente necesita y elaborar una oferta bien hecha y que se ajuste a sus necesidades.
Primero que nada…
Olvídate del “Hola, yo puedo ayudarte con el trabajo, te lo entrego en tantos días y te cobro tanto”.
Eso no es una propuesta real y lo más seguro es que no convenza a nadie. Si es lo que has estado haciendo, debes cambiar tu estrategia. Siguiendo estos consejos, podrás incrementar tus posibilidades de ser contratado:
1. Dedica tiempo a crear un buen portafolios
Esto significa que debes estar preparado para demostrar que tienes los conocimientos que dices tener. No solo es importante que detalles bien cuáles son tus habilidades. También debes mostrar ejemplos de tus trabajos terminados.
Esto puede ser fotografías, capturas de pantalla, enlaces a sitios, videos audios. Cualquier cosa que el cliente pueda ver u oír para comprobar que realmente sabes lo que haces.
No importa que no sean muchos trabajos hechos para otros. Tal como te comentamos en nuestro artículo sobre cómo hacer un portafolio cuando no tienes experiencia, puedes crear tus propias muestras hechas específicamente para colocarlas en tu portafolio.
Eso sí:
Pon esmero en ellas. Las fotos más llamativas y profesionales, los mejores videos o los trabajos mejor logrados. También vale colocar certificaciones que acrediten que dominas los temas que detallas.
También es importante que tu perfil esté lo más completo posible y que tengas tu currículum actualizado.
Pro tip: Un perfil con una fotografía tuya genera mucha más confianza que uno que no la tenga. El cliente (y todo mundo en general) prefiere tratar con un rostro que con un avatar. Eso sí, debe ser una foto profesional. Evita las selfies y las fotos de fiesta o de playa.
Por supuesto, tener un buen portafolio significa actualizarlo constantemente. Si ves que el proyecto que elegiste no tiene una muestra representativa en tu portafolio, sube algo como lo que el cliente necesita antes de ofertar. O ten preparado algo por si el cliente te solicita más ejemplos.
Pero presta atención:
No quiere decir que le hagas una muestra gratis al cliente. Tus muestras deben ser ejemplos, no avances del trabajo que quieres conseguir.
Trabaja en un portafolio significativo y recuerda ir colocando cada proyecto terminado.
2. Mantén una buena reputación online
Otro punto importante es que, si eres freelancer, tu reputación online debe ser la mejor.
Por ejemplo, tus redes sociales deben ser impecables: 100% profesionales. Esto es porque el cliente posiblemente consultará tu perfil y querrá saber más sobre ti. Por ello, es bueno que cuentes con perfiles profesionales en redes sociales, donde coloques cosas relacionadas con tu actividad profesional.
Incluso en tus redes, puedes pensar en tener un logo que represente lo que haces.
En Facebook puedes crear directamente una fan page para colocar información sobre ti. En Instagram podrías colocar las mismas fotografías que en tu portafolios o muchas más.
Sobre todo, puedes reforzar tu perfil de LinkedIn haciendo crecer tu red de contactos. Esto lo haces agregando a las personas con las que has trabajado para que avalen tus habilidades y conocimientos.
Un punto adicional:
Para generar más confianza en el cliente puedes crear tu propio blog o sitio web donde pongas ejemplos de lo que haces. Esto puede ser de ayuda y no es demasiado costoso. Incluso, hay herramientas para abrir sitios web gratis y conseguir hosting a buen precio.
La ventaja de esto es que el cliente puede saber más de ti sin necesidad de descargar nada. Y de cualquier modo, contar con una web generará en el cliente una confianza mayor, pues da un aspecto de profesionalismo. De que sabes lo que haces. Es posible que eso te ayude como factor diferenciador para posicionarte entre las mejores ofertas recibidas.
3. Elige bien tus proyectos
Desde luego, puedes pensar que entre más aplicaciones envíes, más posibilidades tienes de que te elijan en uno. Pero esto no se aplica necesariamente a los proyectos freelance
Sin embargo, puede ser que solo estés gastando oportunidades y perdiendo tiempo, pues cantidad no es igual a calidad. Puede que al enviar ofertas a todo mundo, termines haciendo trabajos que no sean tan bien pagados y termines desistiendo de la idea de ser freelancer. O sentirás que pierdes el entusiasmo y a lo mejor no hagas un buen trabajo.
Todo esto puede derivar en calificaciones no tan buenas en tu perfil, lo cual te afecta negativamente y tú no quieres eso.
Después de todo, si vas a trabajar en un proyecto, debes dar siempre el 100% para obtener la mejor calificación posible. Recuerda que todas las plataformas freelance tienen mecanismos de evaluación y retroalimentación.
Por ello, es importante que los trabajos en los que elijas trabajar los entregues con tiempo y con calidad. Así tu trabajo hablará por sí solo y te será más fácil conseguir otros proyectos que te gusten y sean bien pagados.
De ahí la importancia de no mandar cantidad sino calidad de ofertas.
Es mejor que te enfoques en elegir con cuidado los proyectos a los que aplicas. Y aunque al principio valdría la pena ofertar con presupuestos pequeños para hacerte de una reputación, procura que esta no sea la norma.
Fíjate bien qué quiere el cliente:
Esto incluye que te tomes tu tiempo para leer con cuidado los detalles. Por ejemplo, las habilidades que el cliente busca. También intenta comprender cuál es el objetivo a lograr con su trabajo.
Por supuesto, una vez que has encontrado un proyecto que te interese, debes ser profesional para comunicarte con el cliente.
Sé amable al dirigirte a él en tu oferta. Pero sin caer en la informalidad. Más bien, intenta demostrar que tienes dominio de tema, que comprendes lo que necesita y que estás dispuesto a ayudarle. La idea es generar confianza.
Por ejemplo, puedes indicarle que has trabajado en proyectos similares. O decirle que es justamente el área a la que te dedicas y que tienes algunas ideas geniales que le pueden gustar.
3. Haz las preguntas que creas necesarias
Si tienes alguna pregunta o ves que falta algún dato sobre qué requiere el trabajo, es mejor que le consultes al cliente directamente los puntos adicionales.
Esto puede jugar a tu favor, ya que el cliente verá que tienes conocimientos sobre el tema y que hay aspectos adicionales a revisar.
Un freelancer que hace preguntas demuestra que se ha interesado mucho en el proyecto y que se ha tomado el tiempo de analizar lo que el cliente ha escrito.
Trata de que tus preguntas estén bien formuladas y sea sobre aspectos técnicos en sí. Esto significa leer con cuidado sus requerimientos. Esto evitará también que hagas preguntas de cosas que ya explicó, pues eso da mala impresión y genera molestia.
Por ejemplo, si el proyecto es para desarrollar una app y dice que luego la va a colocar en tiendas como la de Google y la de iOS, si preguntas para qué plataforma la quiere, posiblemente el cliente piense que no leíste el proyecto. Y a nadie le gusta repetir lo que ya dijo.
Cuida que tus preguntas no estén respondidas en el proyecto publicado por el cliente. Es decir, no hagas preguntas innecesarias, porque podría ser contraproducente y dar la impresión de que no pones atención o que no sabes lo que haces.
Esto y el punto siguiente, definitivamente, suman puntos importantes para que elijan tu oferta.
4. Cuida la redacción y la ortografía de tu oferta
He aquí uno de los puntos medulares para que seas contratado: Cuida tu redacción.
¿Por qué?
Por que la buena redacción y ortografía denotan que tienes una excelente formación, que te sabes expresar, que te sabes comunicar, que harás bien las cosas. En síntesis, que eres un verdadero profesional.
Si es necesario, consulta un diccionario online o la gramática, haz preguntas, usa la herramienta de corrección de Word. Pero no dejes pasar errores en tu oferta.
Pero no solo eso.
El paso clave aquí es que en tu oferta detalles los mismos puntos que el cliente ha especificado en su oferta.
Si ha detallado las medidas de un arte, la cantidad de texto de un documento, las funciones de una aplicación, etc. Todo debes volver a colocarlo (técnicamente redactado) en la oferta que le mandes al cliente.
Por ejemplo:
Si el cliente dice que necesita transcribir una entrevista de dos horas, no pongas solo algo como: “Yo te la transcribo por tanto de dinero” o “estoy interesado”.
Mejor especifica: “Te ofrezco la transcripción de la entrevista de 2 horas a un documento de texto en Word, en formato tamaño carta, con revisión ortográfica”.
Como ves, estás repitiendo lo que el cliente puso cuando detallas que la entrevista dura dos horas.
Esto refuerza en la mente del cliente la idea de que tú sí entendiste lo que debes hacer. Da un aspecto de mayor formalidad y ayuda a que tu oferta sobresalga.
Bonus:
Si se trata de un proyecto técnico, ofrece en tu oferta soporte posventa. Esto definitivamente sumará muchísimos puntos a tu favor.
5. Ahorra tiempo con plantillas predefinidas
Existen plantillas de propuestas de proyectos, las cuales puedes buscar en internet. Estas suelen estar bien detalladas y se adaptan a diferentes tipos de proyecto.
Por supuesto, debes tener cuidado de no dejar nada sin personalizar. Pero te ayudarán a ahorrar tiempo y minimizar errores ortográficos a la vez que vas aprendiendo cómo se plantea una propuesta. Con una plantilla es más difícil que se te escape poner algo o que se te olviden detalles.
Luego de un tiempo incluso podrás tener tus propias plantillas guardadas para usarlas cuando las necesites.
6. Cobra lo justo
Para comenzar, puedes consultar el presupuesto que el cliente ha detallado en el proyecto para tenerlo como referencia.
En algunos casos, no lo detallará, sino que tú deberás proponer algo. Esto es porque no todos los clientes tienen experiencia contratando freelance. De hecho, algunos jamás han subcontratado un servicio. Solo buscan alguien que los ayude a un precio razonable.
Debes estar abierto a negociar con el cliente dentro de lo razonable, siempre que el proyecto sea rentable para ti.
Puedes ver cuánto cobrar por tu trabajo en nuestra calculadora freelance.
Ten en cuenta estas consideraciones:
- Si el presupuesto está especificado, analiza bien si se ajusta realmente a sus requerimientos. Si no, no temas indicarlo en alguna pregunta que le envíes. Puedes decirle directamente que podrías ayudarlo, pero que el presupuesto es muy corto. Que tú podrías hacerlo por equis cantidad.
- Si no ha detallado un presupuesto, evalúa bien el tiempo que te va a tomar realizar el trabajo para darle un buen precio.
Esto significa que no te vayas con precios exorbitantes, pero tampoco regales tu trabajo. No solo porque le restas valor a tu profesión, sino porque es posible que en realidad estés perdiendo dinero en lugar de ganarlo.
Esto no lo vas a percibir de inmediato. Pero al final del mes, cuando lleguen las facturas de energía eléctrica, internet, la mensualidad del software, etc., verás que a lo mejor no debiste cobrar 5 dólares por un logotipo, lo cual por supuesto es muy poco.
Como ya hemos comentado en nuestro artículo sobre cuánto cobrar por un trabajo freelance, es importante analizar bien tus números antes de ofertar. Esto se convertirá en proyectos mejor cotizados y a precios competitivos, pero rentables.
Recuerda que el cliente tomará en cuenta el precio, pero no únicamente eso, así que no temas cobrar lo que vale tu trabajo.
7. Comunicate a tiempo con tu cliente
Una vez que has enviado tu oferta, mantente pendiente de cualquier comunicación con el cliente. Ya sea que responda a preguntas que tenías o haga consultas sobre tu oferta o tus habilidades.
Recuerda que la idea de contratar por internet es que las cosas sean más ágiles. Por lo tanto, el cliente espera que tu respuesta llegue pronto.
Si el cliente lo solicita, puedes agendar una videollamada para que te conozca y sepa más de ti o de lo que sabes hacer.
Lo anterior, siempre y cuando no te pida que comiences a trabajar sin haberte contratado a través de la plataforma. Recuerda que el pago en escrow es la garantía de que recibirás tu dinero al finalizar el proyecto.
En conclusión
Como ves, para destacar en las ofertas que envías hace falta más que solo postularse a decenas y decenas de ofertas donde no digas nada.
Obtener proyectos freelance implica trabajo de calidad desde el momento en que ofertes. Desde el cuido de tu perfil con una buena foto, un detalle de tu experiencia y una buena selección para tu portafolio hasta las palabras que eliges para preguntar y redactar tu propuesta.
El cliente notará la diferencia por sobre otras ofertas y es más probable que le generes la confianza que se necesita para que te contrate.
Encuentra proyectos freelance para aplicar en SoyFreelancer.com, donde podrás detallar además tu experiencia y portafolio, así como subir tu currículum para que el cliente pueda verlo.
¡Muchos éxitos!