Cada vez más negocios, tanto a nivel pyme como de gran empresa, se deciden por la contratación de personal freelance para sacar adelante sus distintos proyectos o tareas.
Los beneficios de contratar freelancers son muchos y te permiten ahorrar dinero a la vez que cuentas con talento especializado en tu negocio. Sin embargo, saber elegir al freelancer correcto es todo un arte y hay que saber elegir con cuidado. De ese modo, podrás obtener el resultado que deseas sin que te cueste mucho.
Por ello, ahora veremos algunos tips sencillos pero muy útiles para elegir un buen freelancer. Una las ventajas de aprender esto es que podrás hacer un aliado a largo plazo.
Algunas de las áreas más comunes para contratar freelancers son:
- Diseño gráfico
- Redacción y edición de textos
- Desarrollo y programación
- Marketing digital y redes sociales
- Optimización SEO
- Asesor de negocios freelance
- Entre otras
Sin importar el área en la que necesites la ayuda, estos consejos te ayudarán a evaluar mejor los perfiles y ofertas que recibas. De ese modo, escogerás y contratarás a un mejor candidato para ayudarte en tu pyme:
Publica proyectos más eficaces
Debes tratar de ser lo más específico que se pueda al detallar tu título y la descripción de tu proyecto. Sin embargo, no se trata de que escribas todo un guion de tres páginas, pero trata de describir de forma lo suficientemente clara lo que necesitas y qué resultados esperas.
Si escribes un par de párrafos de 3 o 4 líneas cada uno, será suficiente para que detalles todo sin confundir al ofertante ni abrumarlo con una extensa explicación que tal vez no lea o lo haga desistir de ofertar.
En cambio, un texto puntual y no demasiado largo, te ayudará a atraer a los candidatos adecuados. Si un candidato tiene alguna duda, seguramente te preguntará y podrás conversar con él sobre asuntos más puntuales.
Escribe en el primer párrafo qué estás buscando lograr y en el siguiente explica un poco más sobre lo que hace tu negocio.
Esto es muy importante:
El título de tu proyecto debe describir claramente qué tipo de profesional estás buscando. Más comúnmente de lo que parece, quien publica la oferta escribe el nombre del proyecto o marca como tal, e incluso la dirección web de la empresa.
Esto es un error, ya que lo que quieres no es anunciar tu producto, sino buscar un candidato.
Por ello, lo que debe decir tu título es, de forma breve, el cargo y área del trabajo que quieres cubrir.
Ejemplo: Si quieres crear una página web donde se hable de automóviles, consejos para el mantenimiento, vehículos antiguos, la Fórmula 1, etc…
- No escribas: Website de coches y competiciones deportivas
- Mejor escribe: Busco un desarrollador web
Luego, en la descripción podrás ampliar más sobre el tipo de sitio que buscas, la plataforma, las especificaciones que quieres y el contenido que tendrá.
Un segundo ejemplo: Si deseas el logotipo de tu nueva cooperativa de ahorro y préstamos…
- No escribas: Empresa de créditos personales Supercréditos de R. L.
- Mejor escribe: Necesito un diseñador para crear mi logo
Después, en la descripción sí podrás detallar el nombre de tu marca, qué hace la empresa e ideas de colores o elementos que te gustarían.
Revisa con cuidado los perfiles de los candidatos
No solo se trata de ver el precio de las ofertas que recibes. En este punto, nunca dejaremos de insistir en que el precio no lo es todo, ni debe ser tu punto de decisión.
Por supuesto, sabemos que tienes un presupuesto específico del cual no quieres pasar, pero no contrates al más barato, aún pudiendo pagar un poco más de lo que este pide.
Es importante que antes de elegir revises los comentarios de otros clientes y las calificaciones que estos le dejan.
Por otro lado, debes evaluar con cuidado los conocimientos técnicos que detalle en el perfil principal. Tómate la tarea de ver su currículum para saber si realmente tiene experiencia en el área que tú necesitas contratar.
En ocasiones, el freelancer agrega habilidades a su perfil, pero no cuenta con la experiencia en dicho campo. Dale un vistazo a su currículum y compara lo que se detalla en el mismo contra lo que aparece en su perfil profesional.
Fíjate también en su “área de especialidad”. Por ejemplo, si alguien te oferta como diseñador para redes sociales, pero ves que su área es la redacción, a lo mejor no sea el candidato ideal.
¿Por qué?
Porque contar con una determinada herramienta no te convierte en profesional. Si bien un redactor puede conocer herramientas de diseño, en realidad no es un especialista en esta área y es posible que no sepa muchas de las cosas que un diseñador sí conoce. Teoría del color, perspectiva, escalas, diseño comercial y publicitario, branding, diseño tipográfico, etc.
O si estás buscando un capacitador para el área de redacción, pero su perfil dice que es un psicólogo y no un lingüista o licenciado en lenguas, posiblemente sepa mucho sobre organización de capacitaciones, pero poco de redacción, de lenguaje o de pedagogía.
Otros ejemplos similares se pueden aplicar a cualquier área que estés pensando. Es por eso que revisar el área profesional y las habilidades es un tema clave.
Dale proyectos más pequeños o de prueba a freelancers nuevos
Esta es una buena forma de ir probando el talento de cada uno. Destina proyectos fáciles cuando nunca hayas trabajado con un freelancer. Los proyectos más grandes manéjalos con quien ya hayas trabajado anteriormente y te haya hecho un excelente trabajo. Alguien que además ya conoce un poco sobre tu empresa.
Esta es una gran forma de ir generando relaciones a largo plazo con los freelancers más talentosos.
Si un perfil te llama mucho la atención, pero no estás seguro porque no tiene calificaciones, porque no cuenta con experiencia o porque tú nunca has contratado antes, una gran idea es crear proyectos de prueba antes de otorgar el trabajo real al freelancer.
Por supuesto, esta prueba será pagada, pero te permitirá medir la capacidad del freelancer y su nivel de responsabilidad. Un costo bajo por determinar si un freelancer realmente te va a funcionar.
Como ejemplo:
Si quieres encargar a un freelancer la renovación de la línea gráfica de tu empresa, podrías comenzar solicitándole el diseño de las tarjetas de presentación. Si estas son de tu gusto, puedes encargarle lo demás (flyers, sobres, stickers, catálogos, diseño de promocionales, artes para publicidad, etc).
Otro caso:
O si tienes una tesis de 200 páginas para corrección de textos y unificación de estilo, puedes contratar a alguien que te corrija las primeras 10 a 15 páginas. Así podrás saber si hará un buen trabajo y si entregará a tiempo.
Contrata rápidamente
Un error que muchos cometen cuando desean comenzar a contratar freelance es dejar pasar mucho tiempo entre la solicitud de una oferta para realizar el trabajo y el inicio del mismo.
Si dejas pasar demasiado tiempo, es posible que el freelancer ya haya tomado otro proyecto, que ya no se encuentre disponible o que el precio original haya cambiado.
Piensa en esto:
Un freelancer es su propio jefe y debe buscar constantemente nuevos proyectos, no puede detenerse por un negocio que nunca se concreta. Debe mantenerse buscando y aceptando trabajos de forma dinámica y rápida.
Pero como en todo negocio, existen temporadas bajas y altas. Dependiendo de la circunstancia, el freelancer puede elegir trabajar o no en un proyecto, e incluso cotizarlo o no. Es posible que cuando te ofertó a ti tuviera suficiente tiempo para atenderte, pero que luego la situación haya cambiado.
Por supuesto, puedes pensar “contrataré a otro, entonces”. Pero habrás perdido la oportunidad de trabajar con el que en verdad querías.
Por otro lado, si una oferta es muy vieja, lo más seguro es que el precio de sus servicios haya aumentado durante el tiempo que pudo haber estado ejecutándola si lo hubieses contratado antes.
Como último punto, ten en cuenta que, si publicas un proyecto en cualquier medio y no contratas rápido, tu publicación se puede perder entre muchas otras y tal vez nadie más te oferte. O puede ser que se borre del sitio donde se publicó. Incluso, puede pasar que el freelancer no recuerde haberte ofertado o se dé de baja del sitio y luego no lo encuentres.
Nuevamente, habrás perdido la oportunidad de trabajar con quien realmente querías. Evalúa con cuidado a los candidatos, pero no demores días en contratar.
¿Un plazo recomendable?
De 2 a 4 días tras la publicación de tu proyecto. Así tendrás tiempo de recibir las ofertas necesarias. Una vez pasado ese período, es posible que no recibas muchas más.
No dejes pasar la oportunidad de contratar al talento que quieres en ese plazo en el que la oferta está fresca y el freelancer, disponible.
Paga a tiempo
Este punto es muy importante para mantener siempre cerca de ti al mejor talento freelance. Así como tú necesitas tu trabajo a tiempo, el freelance necesita su dinero en el plazo que han acordado.
Una vez que el proyecto ha finalizado, realiza el pago de honorarios profesionales al freelancer.
Si has dado un anticipo, no demores demasiado el pago final. Recuerda que el freelancer ya ha invertido tiempo, materiales y otros recursos. Por lo tanto, el anticipo ya fue gastado.
Si has contratado para pagar 100% contra entrega, no recibas al freelancer con un quedan a 30 días. Asegúrate de tener el dinero para pagarle el día de la entrega sin falta.
Mejor aún:
Contrata a través de una plataforma como SoyFreelancer.com, donde cuentas con el sistema de escrow o depósito en garantía. De esta forma, te aseguras de guardar el dinero de tu proyecto y tenerlo ya reservado para el momento de pagar.
Una vez que el freelancer termina el trabajo, tú puedes revisar el entregable y liberar el pago retenido o hacer observaciones para que el profesional contratado haga los arreglos necesarios y complete el trabajo a satisfacción.
Prueba los beneficios de contratar freelancers para tu pyme siguiendo estos consejos. Pronto contarás con aliados valiosos de forma flexible y segura.
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