Crear una marca de empresa sólida y bien planificada puede ser el primer paso para que tu emprendimiento sea un éxito. Pero, no todo mundo sabe con certeza qué criterios seguir o cómo empezar. A veces puedes tener una idea vaga de un logo, pero nada más. Sin embargo, la marca de tu empresa no es solo el logotipo o los colores que usas. Se trata de todo un concepto que le da identidad a tu negocio. Esto incluye la forma en la que te diriges a tus clientes, tus valores o los aspectos aspiracionales que deseas transmitir.
Todo esto es parte importante de tu plan de negocio. Es decir que a la hora de crear una marca para tu empresa, debes pensar en muchos factores que son determinantes para ello.
¿Cómo cuáles?
Por ejemplo, cómo se debe ver tu tienda, qué colores usar en el logo y en qué lo vas a utilizar, cómo se identifica tu branding con los valores de tu negocio y si será llamativa para tu público meta. Son preguntas que tal vez te hayas hecho cuando creaste tu emprendimiento y que se deben reflejar en la marca.
Por ello, hoy veremos cómo crear una marca para tu negocio, paso por paso. Estos consejos te pueden servir tanto para crear tu propia marca desde cero como para fortalecer la que ya tienes.
Pero antes…
La primera pregunta a responderte:
¿Qué es una marca?
Una marca es más que un nombre y un logotipo reconocibles que te identifican en el mercado. Es como la gente percibe tu negocio cuando compran, cuando ven tu publicidad, cuando visitan tu sitio web, etc.
Desde luego, se conforma del logo, el nombre y los colores institucionales, pero también incluye el tipo de productos que ofrece, la forma de vender, el lenguaje con el que se dirige a su mercado objetivo e incluso, la reputación del negocio.
Es la “personalidad” de tu empresa, por decirlo de alguna forma.
Por ello para construir una marca de empresa, debes ser consistente con el carácter de tu negocio y mantener dicha consistencia en cada parte del mismo.
Veamos ahora los pasos a seguir para que puedas guiarte.
Cómo crear tu marca paso a paso:
1. Investiga tu mercado meta y a tus competidores
El paso inicial para crear tu marca así como para crear un plan de marketing es conocer más sobre tus clientes potenciales. Cuáles son sus necesidades, qué es lo que buscan, cómo prefieren adquirirlo, cuál es su estilo de vida, intereses o qué problema necesitan solucionar.
A la vez, es importante que “espíes” un poco lo que hace la competencia. Es decir, que conozcas el proceso de ventas, canales de distribución, promociones, etc. La idea no es hacerlo igual, sino saber a qué retos te vas a enfrentar y el mínimo que los clientes de ese nicho esperan.
Por todo lo anterior, es necesario que sepas quiénes serán tus clientes y tus competidores.
Una forma de iniciar es en internet:
Busca tu producto o servicio por Google u otro buscador para ver quiénes te aparecen.
Entra también en foros o grupos de personas interesadas en el tema y mira qué conversan sobre dichas marcas, qué productos o servicios recomiendan. También cuáles son los inconvenientes o quejas de las alternativas existentes en el mercado, si las hay.
Habla con posibles interesados. Los foros, comunidades online y sitios de reseñas son buenos lugares. Pregunta acerca de marcas que prefieren y por qué.
También puedes revisar fanpages o cuentas de redes sociales a las que dichos clientes siguen, si son relevantes para el tema. Fíjate en cómo se promocionan, cómo hablan a su público, etc.
Una vez que has investigado sobre los gustos de tus posibles clientes, averigua también más sobre los proveedores actuales:
Realiza una pequeña compra o pide asesoría sobre sus servicios y fíjate en la atención brindada, en la experiencia que ofrecen al comprador. Así te harás una idea también del proceso de compra que hace el cliente a través de ellos.
Toma nota de qué tipo de productos y servicios se venden más y a quiénes se les podría vender más fácilmente.
Es importante que tengas idea de todo lo anterior para saber la forma en que se hacen las cosas y poder ofrecer algo innovador, que satisfaga la necesidad del cliente superando sus expectativas.
2. Escoge la “personalidad” de tu marca
Inicialmente, se mencionó que tu marca debe tener un tipo de personalidad. Esto significa que está dirigida a cierto sector de la población también. Tu marca debe hablarle directamente al público interesado y ser compatible con los valores que busca al realizar la compra.
Esto quiere decir que no puedes pensar que tu mercado es “todo el mundo”, ya que, si bien todo el mundo podría usar lo que vendes, no todo el mundo tiene las mismas preferencias o está interesado en las mismas cosas.
Recuerda que tu marca es como una persona. No puede ser amiga de todos ni complacer a todos. Y contrario a lo que pueda parecer, esto es algo positivo.
Piensa:
Si tienes una barbería, no puedes usar elementos relacionados con una sala de belleza femenina. Las mujeres estarían fuera de tu mercado directo.
Del mismo modo, si tienes una tienda de joyas y artículos de lujo, tu mercado meta serán clientes con cierto poder adquisitivo y gusto por la exclusividad. No puedes hablar de stocks muy grandes o de ofertas 2 x 1.
Es importante encontrar tu enfoque y construir tu marca a partir de ello. Para ello, hazte algunas preguntas:
¿Cuál es tu elemento diferenciador?
El elemento que diferencia a tu negocio debe poder describirse fácilmente para explicar cuál es tu ventaja competitiva dentro del mercado.
No es lo mismo que un eslogan, ni algo que vayas a colocar en tu página web, sino que para ayudarte a enfocar la visión de lo que tu marca aportará a los clientes.
Puede ser algo así:
Ofrecemos [producto o servicio] con [propuesta de valor] para [mercado objetivo].
A diferencia de [competidor], nosotros [diferencia fundamental].
Algunas ideas:
- Ofrecemos apoyo financiero con bajos intereses para microempresarios.
- A diferencia de otras telefonías, nosotros te cobramos al segundo.
- Nuestros ingredientes son comprados localmente, 100% frescos.
Como ves, todas están enfocadas en mostrar un beneficio al cliente, ya sea que mencionen o no a la competencia.
¿Qué palabras asocias con tu marca?
Piensa en tu propia marca como si fuese una persona, puedes buscar 3 o 4 adjetivos que la definan.
Algunas ideas:
- Alegre, cómodo, fresco, de buen humor
- Elegante, sobresaliente, cautivador, formal
- Aventurero, romántico, en busca de lo inusual
¿Qué metáforas podrías usar para describir tu marca?
Piensa en un animal, un elemento natural, un estado de ánimo, una experiencia, etc. que pueda compararse con conocer tu marca.
Por ejemplo:
Relacionar la marca de un auto con un jaguar, un caballo o un elefante, pueden denotar velocidad, espíritu aventurero o resistencia al trabajo.
Una flor o un rayo para definir una marca de ropa, puede denotar delicadeza o fuerza.
Recuerda que esto tampoco es para que se emplee necesariamente en tu logo. Lo que se hace es reforzar el tipo de personalidad que se le dará a la marca.
3. Elige el nombre de tu negocio
Existen dos tipos de emprendedores:
Los que piensan en el nombre de su negocio desde el inicio y los que lo dejan para el final o no saben cómo ponerle.
Por supuesto, una marca es más que solo el nombre del negocio. Lo que realmente la crea es la personalidad, valores y reputación, todo ello le da un significado dentro del mercado.
Sin embargo, el hombre de tu empresa impacta también tu mercado, incluso es importante en tu registro de marca, tu sitio web o redes sociales. Elegir un buen nombre puede traerte el éxito y hacer notoria tu marca. Por el contrario, un nombre poco creativo puede dejarla en el olvido.
Es más difícil competir o que tu negocio se posicione en internet si tiene un nombre genérico.
Ejemplos: Cocinas & Pantries, Cocinas y Baños, Papeles y Más, La Pizzería… todos nombres reales.
Claro que hay casos de éxito, pero debes tener mucha suerte para posicionarte con un nombre como esos.
Lo ideal es que el nombre de tu negocio no sea difícil de recordar, pero a la vez, que no se confunda con alguno de la competencia, como suele ocurrir cuando es muy genérico: Maderas El Abeto, Maderas El Roble, Maderas El Cedro… Al final, es confuso recordar cuál es cuál. Nuevamente, se puede tener éxito, pero es más difícil.
Protip:
Haz una sesión de brainstorming (lluvia de ideas) con tus socios para crear algo. Otra opción es inventar una palabra que haga referencia a alguna característica de tu producto o servicio o a varias de ellas. Solo procura que no sea impronunciable.
Piensa en la marca de ropa de natación Speedo, por ejemplo, no necesariamente hace referencia al agua o a ropa, pero sí usa la palabra speed (rápido en inglés) para denotar velocidad, algo muy apreciable en un deporte como la natación.
Otro ejemplo deportivo es la marca Nike. que también es el nombre de la diosa griega de la victoria. En dicho caso, no hace alusión a un deporte en sí, sino a lo que realmente el atleta anhela: la victoria. Es un valor aspiracional de la marca.
A veces, las marcas también usan nombres que no tienen nada que ver con el producto, pero aun así tienen éxito. Un caso es el de la marca Apple para ordenadores.
Otras ideas pueden surgir de modificar palabras, muestra de ello son: Flickr (Flicker), Tumblr (Tumbler) o Twitter (Tweeter), donde se sustraen o agregan letras a palabras sencillas para crear una marca memorable.
También se puede usar iniciales, como BMW (Bayerische Motoren Werke), HP (Hewlett Packard) o KFC (Kentucky Fried Chicken). Además, puedes combinar palabras para crear una nueva. Facebook, GoDaddy, Mailchimp, etc.
Importante:
Recuerda que el nombre de tu marca va a ser usado en tu sitio web y tus perfiles de redes sociales. Procura revisar que no esté tomado antes de decidir.
También es recomendable que consultes con algunos grupos de personas de confianza para asegurarte de que el nombre no suene a algo malo, negativo o con un significado poco respetable (como el automóvil japonés Moco… que, por fortuna, no se mercadea en países de habla hispana).
4. Crea un eslogan
Un buen eslogan debe ser breve, fácil de recordar, pegadizo y memorable. Recuerda que este elemento muy posiblemente acompañe toda tu publicidad junto con tu logo. Trata de usar la menor cantidad de palabras posibles, pero de reflejar en ellas un valor de marca.
Desde luego, un eslogan puede cambiar a lo largo del tiempo a medida que las marcas evolucionan o que se encuentran nuevos enfoques de mercado.
Piensa en Coca Cola, que ha pasado por: Disfrute Coca-Cola, El lado Coca-Cola de la vida, Destapa la felicidad, Comparte la felicidad…
Por otro lado, hay otros que se han llegado a convertir casi en una marca en sí mismos y es difícil cambiarlos. Por ejemplo, Red Bull te da alas (Red Bull) o Just do it (Nike).
Si necesitas ideas para crear tu eslogan, puedes buscar la ayuda de un publicista freelance. Son expertos en creación de marcas, mercadeo y posicionamiento publicitario.
Puedes contratar para algunas horas repartidas en sesiones y realizar brainstorming para ideas creativas y geniales.
5. Elige tus colores y tipografía
Esta es una de las partes más importantes a la hora de crear tu marca. Una vez que has definido el nombre y el eslogan de tu negocio, es hora de elegir cómo se presentará visualmente al cliente.
Tu logo debe ser sencillo, fácil de recordar y reproducir en medios digitales y físicos, debe poder usarse sobre un fondo claro, oscuro, neutro, a blanco y negro, etc. y aún así no perder elementos. Además, debes elegir y homologar las tipografías a utilizar para tus futuras campañas publicitarias, así como combinaciones de colores que recuerden a tu marca con solo verlos.
¿Te has fijado?
Cuando ves juntos los colores de Pepsi con la característica ondulación en sus líneas, inmediatamente piensas en la marca, aunque no diga el nombre de la bebida.
Lo mismo pasa cuando ves la manita azul de los likes en un sitio web. Sabes que ese clic que des se reflejará en tu perfil de Facebook como un “Me gusta”.
Es porque los colores y la forma son parte de la marca. Por ello, definirlos claramente es parte clave del éxito.
Para este paso, podrías requerir ayuda o asesoría de un diseñador experto en branding corporativo. Toda la información recopilada hasta ahora, así como los valores que has definido para tu marca, te serán de gran utilidad a la hora de transmitir el mensaje al diseñador.
Te será mucho más sencillo explicarle qué buscas que el logo refleje.
Colores
En el mundo del marketing, los colores no solo definen cómo se verá tu marca, sino que transmiten mensajes. Ayudan a reforzar el valor de tu marca y a diferenciarte de tus competidores.
¿Quién confundiría una cerveza Heineken con una Budweiser? No solo los logos son distintos, también los colores de los envases lo son y estos dan una noción del tipo de cerveza que contienen.
Lo mismo pasa con restaurantes de comida. Los colores rojos y negros suelen denotar carnes y los verdes, comida con predominancia vegetal.
Sin embargo, en la psicología del color no todo está escrito, ya que si bien, algunos colores evocan ciertas cosas (rojo, pasión; azul, calma verde, frescura, etc.), no es una norma inflexible y también puedes basarte también en tu gusto personal.
Ten en cuenta, por supuesto, que tu logo podría usarse sobre fondo blanco, sobre fondo negro, en escala de grises, a un solo tono, etc. Prueba distintas variantes y fíjate que ningún elemento se pierda.
Para mejores resultados, es ideal contar con un diseñador experto en branding. Podrá presentarte ideas de logo y diferentes versiones de colores basados en una paleta preestablecida.
Tipografía
Una parte importante que no debe olvidar es elegir algunas tipografías para usar en tu publicidad, sitio web, etc.
Primero que nada, elige la tipografía que usarás en tu logo. Busca una que vaya acorde con tu identidad de marca. Esto quiere decir que si vendes productos de ferretería, no uses tipos cursivos. Si es una tienda de artículos infantiles, puede ser algo más divertido, con formas redondas, pero que sea fácil de leer. También recuerda la tipografía del eslogan.
Para tu sitio web elige también al menos dos. Una para títulos y otra para el cuerpo de los mensajes.
Si bien es cierto que muchos visitantes pueden cambiar las preferencias tipográficas para navegar desde sus teléfonos móviles, no debes dejar de personalizar tu sitio para quienes lo vean con las fuentes originales.
De preferencia, evita la tipografía demasiado decorativa, prefiere la sobriedad y la facilidad para leer.
La tipografía sin serifas es la que mejor se lee en pantalla. Pero también depende de tu gusto personal.
Para la publicidad que hagas por medios impresos o tus tarjetas puedes usar la que elegiste para el eslogan y una o dos adicionales. En los medios impresos, al contrario que en línea, los tipos con serifas facilitan la lectura.
Un tip:
Procura no elegir fuentes muy difíciles de encontrar, pues a la hora de hacer publicidad, las personas que contrates para ello pueden necesitarlas. Puedes ver algunas sugerencias de tipografía que combina bien en FontPair, pero recuerda tener en cuenta la opinión de un experto en diseño publicitario para elegir algo acorde a tu marca.
6. Crea tu logo
Seguramente, a estas alturas ya tienes más o menos una idea de cómo quieres tu logo. Debe ser algo único, fácilmente identificable y que puedas usar en diferentes formas y tamaños.
Piensa en que podrías usarlo en espacios cuadrados o rectangulares, verticales u horizontales, coloridos o a un solo tono, a veces negro sobre fondo blanco o a veces blanco sobre fondo negro.
Además, puede usarse impreso en físico o en la web. Incluso en los pequeños favicons que ves en las pestañas del navegador.
En todos los casos, tu logo debe distinguirse bien y no perder características que lo diferencien del resto.
Si tu logo solo es texto va a ser más difícil de distinguir en lugares pequeños. Una buena idea es agregarle algún elemento que se pueda usar independiente.
Puede ser un adorno en una inicial, como en el caso de SoyFreelancer, en que la S inicial tiene la forma de un pequeño maletín y puede usarse sola en espacios pequeños.
Otra idea es agregarle a tu logo un pictograma, tal como se hace en el logo de Whatsapp. El texto se acompaña de la burbuja verde con un auricular dentro. De hecho, es la versión que más se utiliza en todas partes. Debido a su popularidad, ya no es necesario que diga “WhatsApp” par que la gente lo reconozca. Lo mismo pasa con el logo de McDonald’s, que se distingue por la M amarilla sin necesidad de que se agregue el nombre como tal.
Por otro lado, puedes decidirte por un diseño abstracto, como una figura geométrica que acompañe al texto del logo.
Lo importante es que lleve los colores y tipografía que has elegido como parte de tu marca.
*Mira aquí los distintos tipos de logo y cómo crear el tuyo de forma profesional
Para diseñar tu logotipo es mejor que contrates un diseñador profesional. Esta persona se encargará no solo de dibujarlo en vectores para que pueda ser usado en cualquier tamaño sin que se deforme, sino de crear varias versiones de cómo se usará sobre distintos fondos y en distintas proporciones. Además, si no lo sabes con exactitud, te ayudará a determinar los colores exactos de Pantone que se deben usar siempre en tu logo y en toda tu identidad de marca.
7. Uniforma tu negocio con tu identidad de marca
Como ves, crear una marca de empresa para tu negocio es un proceso que requiere tiempo, creatividad y cuidado de tu parte. Lo ideal es que busques ayuda para llevar a cabo el desarrollo completo de tu marca, desde la investigación de mercado hasta la creación de tu logotipo.
Ahora es momento de implementarlo:
Ya que tienes tus colores, tipografía, logo y personalidad de tu marca, es momento de que la apliques a todos los puntos posibles de contacto con el cliente.
1. Papelería y empaques:
Tarjetas de presentación hojas membretadas brochures informativos, sobres, bolsas, viñetas, calcomanías (stickers), etc.
2. Promocionales para regalar:
Agendas, libretas, lápices, bolígrafos, calendarios, vasos térmicos, botellas deportivas y todo lo que se te ocurra para regalar a tus clientes.
3. Redes sociales:
Portada e imagen de perfil en tu fanpage de Facebook, cuenta de Twitter, Instagram, Youtube y cualquiera que tengas.
4. Tu sitio web:
Esto es muy importante. Tu sitio web debe ser prácticamente una sucursal virtual de tu tienda. Debes usar las tipografías y colores que has elegido, tener las secciones que tienes en tu negocio, fotografías o información sobre tus productos y servicios e información de contacto.
*Puedes contratar a un diseñador de sitios web para ayudarte con la tarea.
5. Correo electrónico y boletines:
Coloca tu logo y datos de contacto en tu firma del correo electrónico. Haz lo mismo con todas las firmas de tus colaboradores. Que toda forma de comunicación que el cliente reciba tenga tu imagen de marca. Tus campañas de email marketing también deberán personalizarse con tus colores.
*Encuentra un experto en email marketing para ayudarte.
6. Publicidad:
Recuerda que tus colores y tipografía ayudarán a que tu publicidad se diferencie del resto. Así posicionas tu marca en la mente de tus clientes potenciales.
7. En tu local:
Como no podía ser de otra manera, la decoración de tu salas de venta u oficinas donde atiendas a los clientes deberá tener colores de tu imagen de marca. Y por supuesto, debes mostrar tu logo al entrar. Si es posible, también ponlo en estantes, menús u otros elementos. Juega con los colores que elegiste para ambientar lo mejor posible.
Pon tu logo y colores en cualquier otra cosa que se te ocurra.
*Puedes buscar ayuda de un diseñador de interiores.
Para concluir:
Por supuesto, el trabajo no se detiene. La creación de una marca es algo que no se queda en haber elegido tu logo o colores, o un eslogan pegadizo. Necesitas reforzar tus mensajes y valores empresariales, siendo consistente en el tiempo. Realizando publicidad, campañas y promociones acordes con tu imagen y personalidad de marca, mejorando el servicio al cliente cada vez. Brindándole experiencias únicas a la hora de comprar.
Poco a poco irás conociendo mejor a tus compradores y clientes potenciales para pulir tu marca, rediseñarla, mejorarla y que vaya evolucionando con las tendencias del mercado. Recuerda siempre que puedes contar con apoyo profesional para crear una marca desde cero o rediseñar completamente tu imagen de marca.
Regístrate gratis en SoyFreelancer.com y publica tu proyecto o requerimiento para encontrar miles de freelancers en distintas áreas para ayudarte en las diferentes etapas de tu creación de marca.
Pon manos a la obra y comienza a construir tu identidad de marca como los grandes.